El centrocampista pide tranquilidad y confía en que la racha va a cambiar inmediatamente, pues el juego del equipo es bueno y se crean ocasiones. Reconoce que ante el Sevilla Atlético le costó por llevar mes y medio sin competir, pero el pasado domingo se notó mejor físicamente y quiere aportar su experiencia en la lucha por el objetivo
Con semblante tranquilo. A Kike Márquez no le roba el sueño que el Alba sume tres partidos sin ver puerta. Una tranquilidad que no está instalada en el entorno, pero sí en un vestuario que mantiene fe ciega en el trabajo que se está haciendo cada día en la ciudad deportiva. “Llevamos tres partidos sin marcar, pero no puede crear dudas en el vestuario porque el trabajo está ahí. Se hizo un buen partido y se hicieron las cosas para ganar en Linares. Lo más importante es que entre la pelota, pero se crearon las oportunidades. Tenemos que tener mentalidad fuerte, confianza, los goles llegarán… Igual ahora llega una racha positiva”, indicó.
“Los goles llegan cuando menos te lo esperas. No hay que agobiarse con ese tema. No suma. El equipo está creando ocasiones”, agregó. “Lo que mandan son los goles, es lo más importante. Pero eso no tiene que manchar el buen partido que se hizo en Linares. Te vas con la sensación de que podrías haber ganado bien y con un resultado abultado”.
La falta de gol va a asociada a una suma insuficiente de puntos, dos de los últimos nueve en juego. Pero tampoco hay dudas. “En cuanto a puntos puede haber cierta preocupación, dos puntos de nueve puede crear dudas en el entorno del club, pero en el grupo no porque el trabajo está ahí y este grupo tiene ganas de trabajar día a día”. “El entrenador está tranquilo. Sabe perfectamente lo que hace el equipo, lo que propone el equipo para ganar los partidos. Los resultados llegarán seguro y los goles también. Se está haciendo un gran trabajo y los resultados llegarán”, defendió. “Lo más importante es ganar y que la pelota entre, pero tenemos que quedarnos con el trabajo del equipo. El equipo hace lo posible por ganar los partidos”.
La próxima oportunidad, Cornellà. Y es lo único que ahora le importa al ‘14’. “Ahora prácticamente ha empezado otra Liga nueva porque todos los equipos se están jugando su futuro. Ahora viene el Cornellà, un partido complicado, aunque es cierto que ellos fuera de casa no sacan los resultados que sacan en casa. Pero no deja de ser un equipo peligroso. Querrá darnos la lata en casa, que es donde tenemos que ser fuertes”, reseñó. “No tenemos que fijarnos en los bloques de partidos que vengan ahora, sino en el Cornellà que son los puntos que podemos ganar. Debemos centrarnos en el partido del Cornellà, no perder energía en otros partidos porque todavía no ha llegado ese momento”.
En cuanto a su situación personal en el Alba, reconoció. “La semana pasada en casa fue una entrada que no esperaba por la lesión de un compañero e igual me costó un poco después de mes y medio sin competir. En Linares me encontré mejor físicamente y me noté con más confianza”.
Y en cuanto a lo que ve, Kike analizó: “Veo una plantilla súper competitiva, puede jugar cualquiera y veo competencia sana. Desde la llegada me ha sorprendido las ganas que tiene este grupo de trabajar en el día a día. Esa alegría de la juventud, más la experiencia de los veteranos, puede hacer una comunión muy buena”.
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